Capitulo Ocho

Nos vemos mañana. Besos y espero comentarios. Les dejo uno largo porque no se cuando vuelva. 

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Mañana vuelvo a Buenos Aires. Mi estadía en El Tigre fue… ¿Pesado? Claro que lo fue ¿Tedioso y aburrido? A veces. Mi vida es un eterno “Quita y pon” algo tiene que salir mal siempre. Tengo buenos amigos, eso lose. Tengo un padre imperfecto, eso me parece perfecto. Pero que mi mamá falleciera y que mi hermana tenga leucemia es algo que no entiendo, no comprendo como algo puede ser tan horrible, como algo se puede sentir tan horrible. Salía casi todas las noches, eso es algo a lo que estoy acostumbrada. Con respecto al tema de Juan Pedro Lanzani: Quise sacarlo de mi mente, pero al parecer es mala idea que te guste un famoso, siempre lo miras en todas partes. Martin y Pablo me dijeron que había preguntado varias veces por mi, yo obviamente que no lo entendí, digo me había visto máximo siete veces. ¡Dios! ¿Qué me pasa con este chico? La última vez que me enamore salió para el santo orto, todo mal y triste. Paloma me llamaba día por medio, me alegraba saber que no había tenido ninguna recaída, eso me habían dicho. Papá me había hablado como diez veces en todo el mes y medio que estuve aquí. Las cosas en mi vida no estaban saliendo como estaba acostumbrada y no se si eso me alegra o me esta cagando la existencia. Decidi volver mañana porque es el cumpleaños de papá y le harán una fiesta por lo alto, al parecer no puedo faltar, según Emilia, yo creo que si, pero no me gusta perder el tiempo discutiendo con ella.

Conducía por la carretera hasta Buenos Aires, me había retrasado porque no encontraba la cadenita que me dio mamá. Llame a Paloma antes de salir para avisarle que ya iba, ella le aviso a Martin, quien dijo que me iba a esperar en mi casa.

Llegue pasadas las cuatro, estacione y baje las valijas, mi hermana salió de la casa y corrió hacia mi, me abrazo

-¡Hola, mi amor! –La abrace fuerte y bese su cabello- ¿Cómo estas?

-Bien. Gracias –La mire extrañada- Esta Peter en la sala –La mire sorprendida. Mis adentros se estaban muriendo por dos razones: La alegría por verlo. Y que me da alegría verlo. Baje las valijas, Paloma me ayudaba, entre a la casa, después al living, los mire-

-Hola –Deje mis cosas en el suelo, Martin y Pablo me abrazaron- Hola –Sonreí y besaron mis mejillas- ¿Todo bien? –Asintieron, Pedro se levanto y se acerco- Hola

-Hola, Lali –Sonreímos- Puedo…-Asentí y me abrazo- ¿Te pido algo? –Asentí- No te vayas mas –Me separe y lo mire sorprendida-

-Voy a dejar esto –Señale las valijas. Las tome y las subí a mi habitación-

-¿Podemos hablar? –Me asuste, me gire y mire a Peter que entraba a la habitación, asentí- Lali, yo no se que me pasa, no entiendo que me pasa, esto te juro que no es chamuyo, desde que te vi que no puedo sacarte de mi cabeza, estoy todo el dia pensando en vos, pensando en cuando iras a visitar a mis hermanos para verte, para oir tus voz –Lo mire incrédula. ¿Cómo puede ser que le pase lo mismo?-. No soy de enamorarme, no entiendo como…-Asenti-. Siento que me pasa algo groso, pero enserio groso con vos, no se si es amor, no te voy a mentir, pero se que cuando entraste por esa puerta me dio mucha alegría y alivio de saber que estas en mi misma ciudad…

-Basta, por favor –Me miro sorprendido-. Mira, Pedro, te voy a ser sincera, muy sincera, se que siento cosas por vos, lo se, pero no quiero sentirlas, no me veo de novia con vos ni mucho menos sufriendo por vos, no. Me fui por una razón y esa razón fuiste vos, te quería olvidar, me quería olvidar de toda esta mierda que me pasa cuando estas cerca. Y es que no lo entiendo ¡Te vi tres veces! ¿Cómo es posible que alguien se enamore tan rápido? –Lento caí en la cuenta de que dije que me enamore de él- Y no se como carajo hacer para lograrlo, para olvidarme de ti, para no sentir esto que siento

-¿Y que sentís? –Se acerco a mi-

-Ganas de besarte, ganas de que no te vayas nunca de mi lado –Me tomo por la cintura, cuando estaba a centímetros de mi, alguien carraspea, se separa y veo a mi padre tras suyo, sonreí y corri a abrazarlo- ¡Hola, papu! –Me abrazo fuertemente y beso mi mejilla-

-¿Quién sos? –Le hablo a Peter-

-Pedro Lanzani, un gusto –Extendió su mano, pero la dejo caer al ver que papá no la estrecho-

-El hermano de Juan Martin –Asintió- Bueno, un gusto

-Feliz cumpleaños –Bese su mejilla y me abrazo mas fuerte- ¿A qué hora empieza tu fiesta?

-Seis –Asenti, beso mi cabello- Vamos abajo –Nos miro sospechoso, espero a que saliéramos para cerrar la puerta tras de si-  ¿Queres comer algo? –Llegamos al living, estaba Paloma charlando con Martin y Pablo que la miraban anonadados-

-No, no tengo mucha hambre

-Veníamos para llevarte a comer, La –Lo mire tierna-

-Salgo a comer con ellos y vuelvo para ir a tu fiesta ¿Si? –Asintio resignado- Tomo mi cartera y vengo –Me levante y fui por mis cosas, me mire al espejo y decidi cambiarme de remera-  ¿A dónde vamos?

-Tentissimo –Sonrei. Era mi lugar favorito-

Comi con ellos y me puse al dia, Peter participaba cada tanto, no hablaba mucho, recibió dos llamadas y en ambas sus hermanos lo miraron mal cuando sono el teléfono.

-¿Visitaron a Paloma durante el tiempo que no estuve? –Me miraron- Me conto que conoció a “Los Lanzani”

-Si, fuimos un par de veces, queríamos saber como estaba –Dijo Pablo. Sonrei agradecida- ¿Pensas volverte a ir? –Mire que Peter levanto la mirada de su plato-

-No creo, no sirvió mi forma de despeje

-Te lo dije, pero no me haces caso nunca

Lali, venite, es tiempo

-Paloma me mando un mensaje, tengo que ir a casa

-¿Todo bien? –Mire a Peter y asentí-

-¿Me llevan?

-Obvio que si, pulga

Condujo hasta mi casa, bese la mejilla de los tres, agradecí y baje. Un vestido color salmon con detalles de lentejuelas en la parte del top, lo demás caia libre, zapatos con diamantina dorada cubriéndolos, maquillaje discreto, cabello lacio, perfume, cartera de mano pequeña con lo esencial dentro. La cena en si fue  buena, la velada comoda, los invitados innecesarios. Todos son un puñado de hipócritas, no me caen bien y son el propósito por el cual casi no voy a reuniones con papá. El dia siguiente, la semana y el mes pasaron casi sin ver, mi vida se estaba volviendo rutinaria.

-¿Todo bien, chiquitina? –Asenti y me sente junto a mi mejor amiga. Rochi Igarzabal- No esta todo bien ¿No?

-Pasa que mi vida se esta volviendo monótona

-¿Paso algo con Lanzani actor? –Negue- ¿Ya no sentís nada por él? –Me encogí de hombros- No queres hablar –Negue- ¿Comida queres? –Asenti- Ya vengo –Asenti, beso mi mejilla y entro a la cocina-

Lali, tenemos que hablar, por favor, lo que sucedió ayer no debió pasar

Ayer… ¿Por qué paso eso ayer? 

El alcohol estaba muy presente en todos las personas que estaban en ese restaurant, mas que nada en el grupito sentado en la mesa diez

-Lali, veni, veni, Petiza –Me levante a penas y camine hacia mi amigo, tenia la vista nublada y la de Pedro pegada a mi-

-¿Qué queres, JuanMa? –Sonrio y me abrazo-

 -¿Sabes que me gusta mucho cuando me decis “JuanMa”? –Mire sus ojos. Su aliento olia a alcohol, igual al mio, al de Peter y al de cualquiera de la mesa-

-Si, si se y también se…-Cubrio mi boca por la suya, cuando caimos en cuenta de lo que estábamos haciendo, nuestras cabezas se despejaron, abrimos los ojos y nos separamos- ¿Qué mierda…?

-Besas bien –Se reia desaforadamente, provoco risa en mi, cuando me gire para volver a mi asiento mire que Peter nos miraba entre sorprendido y enojado-

No habíamos hablado desde entonces, y eso, eso era muy raro entre nosotros. Rochi llego a mi lado con un plato de ñoquis con salsa roja, me los comí sin chistar, últimamente como por pura costumbre, no hay nada de apetito en mi y creo saber porque es

-No, ya, dale, decime que tenes –La mire-, eso no tenia queso, a vos te encantan los ñoquis con salsa roja y queso encima

-No pasa nada, Ro…-Me miro cansada- Juan Martin me beso, bah’ nos besamos –Me miro sorprendida- estábamos muy alcoholizados

-Pero eso no es todo ¿No? –Negué- Contale a la amiga Rochi que te tiene tan mal

-Peter nos vio –Solté sin más. No sé porque eso me tenía tan triste, quiero no quererlo, pero me es imposible lograrlo-

-Lali ¿Por qué no enfrentas lo que te pasa con ese pibe?

-Por lo mismo que no quiero aceptar que Paloma va a morir muy pronto –Me miro-

-¿Por miedo? –Asenti- Lali, son cosas muy diferentes una y otra

-Lose, lose, pero es el mismo sentimiento –Torcio la boca en señal de tristeza-

-Mari, tenes que aceptar que no todos los hombres te van a hacer lo que te hizo Camilo –La mire triste y me recosté en sus piernas-. Ese pibe es un asco, una basura, una mierda, lo que te hizo no tiene nombre…-Negue-

-Si, si tiene, se llama “Hacerme cornuda con una puta” y que puta, eh, mi prima –Sonrei ironica-, esque hasta imbécil es; Mira que engañarme en mi propia casa, en mi propia cama, en una reunión familiar. Falto que me pidieran que los filmara –Me miro sonriendo-. Yo se que no todos los hombres hacen lo mismo, pero está en mi naturaleza el ser desconfiada, ni modo –Me encogi de hombros- Ya me voy

-¿A dónde?

-No se, con esta depresión a suicidarme, yo creo –Me miro seria y reí- Mentira –Bese su mejilla y Salí de su apartamento-

Subí a mi auto, lo encendí y también la radio

Se despiden de los escenarios. La despedida de TEEN ANGELS. Hoy quiero escuchar al corazón, hoy quiero pintar al mundo de otro color, ese mundo que me espera y al que al misterio me lleva…

Saque la radio y puse el disco de Beyonce

*¿Dónde estas, hija?

*Camino a la casa ¿Por?

*No, venite al Suizo, Paloma tuvo otra recaída

*Dale, voy para alla –Corte y con furia avente el iPhone al asiento del pasajero- Mierda –Conduje muy rápido, llegue en menos de dos minutos, había un tumulto en la puerta, pero a empujones logre entrar, pregunte por mi hermana en recepción y corrí hacia el lugar que me indicaron. Mi papá estaba en la puerta, corrí hacia él y lo abrace- ¿Qué le paso? ¿Cómo esta?

-Mal, está muy mal –Negué y me abrazo- Voy a entrar a hablar con Amadeo –Asentí, nos separamos, me recargue en la pared y me deslice hasta el suelo, me abrace a mis rodillas y llore. Mi hermana no se puede ir sin mí-

-¿Lali? ¿Lali, sos vos? –Levante mi cara y vi tres cuerpos borrosos correr hacia mí, se sentaron junto a mi- ¿Qué paso? –Eran Martin, Pablo y Peter-

-Paloma –Mire a Martin y me abrace a él- Está muy mal, Tincho

-Tranquila, preciosa –Beso mi cabeza. Pablo tenia mi mano enredada a la suya, me daba suaves caricias. La puerta se abre y levanto mi cabeza-

-¿Qué pasa?

-Tenemos que hablar, Lali –Lo mire triste, me levante con la ayuda de Pablo, Peter al parecer tenia el brazo fracturado. Camine hacia mi papá- A Paloma le quedan menos de tres meses –Negue incrédula- Si, hija

-¿Es seguro? ¿Dónde esta Amadeo? –Miro detrás de mi, estaba saliendo de la habitación de mi hermana, me acerque a él con duras pisadas, lo mire enojada- Me mentiste, me dijiste que la ibas a salvar, me mentiste

-Lali, no…-Golpee su pecho. Me miro triste. Lo volví a hacer, y otra vez, mis lagrimas acompañaban los golpes, otra vez, otra, otra, ya no pude y me abrazo antes de caer al suelo- Lo siento mucho, Lali

-No, no lo sentís. Te odio, Benjamín, te odio mucho –Me levante y abrace al primer cuerpo que encontré. Peter. Me rodeo el cuerpo con el brazo sano y llore todo, moje su camisa. Me separe y lo mire, seco las lagrimas con su pulgar- Perdóname, tu camisa… –Negó restándole importancia-

-¿Mejor? –Negué- Bueno, veni –Me abrazo la cintura y me pegue a su pecho. Esto me daba tranquilidad-

-¿Queres ver a Paloma, hija? –Asentí, me separe de Peter y bese su mejilla como agradecimiento. Entre a la habitación y la mire, estaba despierta, se veía tan débil, tan no Paloma-

-Hola, tonta –Le sonreí nostálgica y me senté junto a ella- ¿Todo bien?

-Vos sabes que no –Tomo mi mano-

-Mira, si Amadeo dice que es tiempo, es tiempo, no te estoy diciendo que es la voz de la razón, pero es medico el pibe. Capaz y es mamá la que me esta llamando, es tiempo de que nos conozcamos ¿No?

-No –Me miro seria-. No quiero que te vayas, hermanita –Apoye mi cabeza en su vientre. Las lágrimas volvieron a salir-

-No llores, boluda, ni que nos quisiéramos –Sonreí pegada a su panza-, quiero acostumbrarme, no me la hagas muy difícil, por favor –Su voz se quebró, levante la cabeza y me miro con los ojos aguados- Decile a mamá, vos que la conoces mas, que no me aleje de vos, por favor –La abrace. Esto no puede estar pasando-

Volvíamos a casa dos días después. Paloma estaba, dentro de todo, estable. Salíamos muy poco, incluyendo a papá. Convivíamos demasiado, incluyendo a Emilia. Teníamos mucho cuidado con Paloma y su salud. Aquí estábamos, una semana después de que me dijeran que dentro de tres meses mi hermana ya no va a estar conmigo.

-¿Y entonces como esta?

-Bien, bueno dentro de –Asintieron-. ¿Ustedes como están? –Estábamos sentados en el pasto del club de Rugby AA-

-Bien, todo bien, te extrañamos –Sonreí y me recargue en el hombro de Juan Martin. Todo había quedado bien entre nosotros-

-¿Tu hermano está muy ocupado?

-Sí, con eso de que su banda se separa él está muy triste, estresado, apurado todo el tiempo

-Bueno, pero creo que es tiempo de que crezca ¿No? –Asintió- ¿Y Bauti?

-El enano está muy bien, jodon como siempre

-Solo desapareciste una semana, Mari, todo esta igual que siempre

-Ay, bueno, estaba a punto de preguntar por vos, Pablo –Lo mire irónica, se sentó junto a mí y me acerco a él- Además a Bauti lo vi dos veces desde que llegue de El Tigre

-Nunca nos dijiste porque te fuiste –Mire a mi amigo, complicada-

-A ustedes no les puedo mentir ¿No? –Negaron obvios, suspire- Bueno, pero los necesito frente a mi, quiero ver sus reacciones

-¿Tan grave es? –Dijo mi amigo el mayor. Pablo-

-¿Sin rodeos ni vueltas? –Asintieron- Me enamore de Pedro –Me miraron incrédulos y poco después estallaron de risa. Los mire enojada y me levante- Váyanse a la mierda –Comencé a caminar hacia mi auto. De pronto dos brazos me jalan hacia atrás- 

Continuara 

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Beso