CAPITULO OCHENTA
-Señora,
la criatura puede asfixiarse con el cordón umbilical si lo tiene por parto
natural
Lali: Esta bien, pero que
no le pase nada –Mis lagrimas caían y mi vientre dolía-
Entramos a la sala de cirugía y no recuerdo mas nada. Desperté en una
habitación blanca, con flores y globos que decían Es niña, la luz tan brillante lastimo mis ojos, toque mi vientre y
ya no estaba mi bultito, mire alrededor y no mire a nadie, poco después de
estar orientándome, tocaron la puerta y la cabeza del amor de mi vida, se
asomo, me sonrió y entro, tenia a nuestra hija en brazos. Ana Victoria
Peter:
Mira quien se despertó, hija, tu madre hermosa –Sonreí y se acerco para darme
un suave beso en los labios-
Lali: Hola, amor –Le devolví el
beso y cuando nos separamos mire a nuestra hija, bese su cabecita-
Peter: ¿La queres cargar? –Lo
mire obvia- Aquí tenes, Victoria esta un poco inquieta
Lali: ¿Por qué? –Tome a mi hija
en mis brazos y la abrace con cuidado- ¿Qué te hicieron esos malos doctores?
Peter: Solo extrañaba a su mami
–Sonrei y le hice un campito para que se acostara a nuestro lado, lo hizo y nos
abrazo al instante- Que preciosas que son mis mujeres
Lali:
Te amo, mi amor –Bese sus labios y tocaron la puerta- Adelante
-Hola,
que hermosa escena –Le sonreí a mi hermana- ¿Cómo esta?
Lali:
Bien, es hermosa
Euge:
¿Me dejas cargarla? –Asenti y se la pase- Hola, preciosa, soy tu tia, mi amor
–Sonreia- Te voy a decir Ana, porque Ana Victoria es medio de culebrón ¿Verdad
que si? Pasa que tus papás son muy dramaticos y te quisieron poner un nombre de
telenovela –Nos guiño un ojo- Vos no vas a ser tan complicada como tu madre,
no, vos vas a ser sencilla, como tu papá
Lali:
No hables como si no estuviera aquí, che
Euge:
Es la verdad, bueno, me tengo que ir –Beso la cabecita de su sobrina y se la
dio a Peter, beso nuestras mejillas- Es preciosa, los quiero, chau –Se fue-
A lo largo de la tarde fueron pasando mis amigos y
familiares. A las doce del dia siguiente ya estaba llegando a mi casa. Fui
hasta la habitación principal y me acoste, al lado de mi esposo y mi hija. Me
desperté porque me movían
Peter:
Tu hija quiere pecho, amor –Sonrei adormilada y me sente- Voy a hacerte un te
¿Queres algo mas?
Lali:
No, creo que es momento para ponerme a dieta y…-Nego- ¿Qué?
Peter:
No te podes poner a dieta, al menos no hasta que dejes de amamantar a mi hija
¿Estamos?
Lali:
Esta bien
Peter:
¿Queres algo aparte del té? –Asenti timida- ¿Medialunas? –Asenti sonriendo
mientras me destapaba el pecho- ¿Me das un beso? –Lo mire sonriendo- Bueno, dos
–Plante dos besos tiernos en sus labios y se fue-
Lali:
Que hermosa que sos, Anita mia –Bese su frente y sentí como solto, le hice el
provecho y a los minutos eructo, yo rei- Que linda que sos –Ella me miraba con
los ojos bien abiertos- Tenes la mirada de tu papá –Toque su naricita y hizo un
gesto de molestia-, que linda naricita –Toque su barbilla-, que linda boquita
–Bese sus mejillas-, que hermosa que sos, te amo –Bese su cabecita reiteradas
veces y tocaron la puerta- Adelante
-Hola,
preciosas –Sonrei mirando a mi hija- ¿Cómo estas, petisa?
Lali:
Bien ¿Vos, Andrew?
Andrew:
Bien ¿Me dejas cargarla? –Asenti con una sonrisa y se la di- Hola, princesa
–Beso su cabecita y Peter entro al cuarto, primero lo vio a el y después a mi,
lo mire sonriéndole- Peter
Peter:
Andrew –Sonrio-, aquí tenes, amor –Sonrei y me dio la taza de té con las
medialunas. Estiro la boca y deposite un besito, cuando nos separamos Andrew
estaba mirándonos con una sonrisa-
Andrew:
Aquí tenes, esta preciosa –Beso su cabecita y se la paso a Peter-
Peter:
Gracias –Sonrio y abrazo a su hija- La llevo a pasear afuera para que hablen
–Asentimos y salió-
Andrew se fue cerca de las cuatro, merendamos algo ligero y estuvimos
el resto del dia afuera en el patio, admirando a nuestra beba. Dormimos con
ella en medio nuestro. Al dia siguiente y los próximos tres meses fueron mas de
lo mismo; Visitas inesperadas para ver a Ana Victoria, salir a comer en
familia, mirar a mi beba todos los días, todo el dia, trabajar en la editorial,
llevársela a mi mamá o a la de Peter para que la cuidaran y después pasar a
recogerla yo o Peter. Llegar a casa
cansados, cenar, hacer dormir a Victoria y dormir.
Lali:
¿Vas a venir a cenar?
Peter: No creo, Lali, mandale un beso a Victoria –Corto-
Continuara
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esa ultima parte no me gusto... creo que van a haber problemas
ResponderEliminar@ROCHI16TA