Siempre te voy a amar...

Capitulo 78

Invitaciones listas. Vestido listo. Estancia lista. Solo faltaba dar el si en el altar junto a Peter, y para eso solo faltaban diez días. Las fiestas fueron muy lindas, anunciamos nuestro embarazo, y entre felicitaciones y abrazos, recibimos el año nuevo. Con Peter cada vez mas ansiosos, al final las invitaciones habían sido sencillas y claras, los queríamos con nosotros en ese dia tan especial y solo se habían entregado cien, solo queríamos con nosotros ese dia a los que fueran escenciales, sin tanto circo, algo sencillo. Peter llegaba tarde casi todos los días y cuando llegaba temprano, llegaba cansado o llegaba con ganas de mimar a mi ya crecido vientre. Pasabamos lindo tiempo juntos. Y después de calmar mi duda de ¿Cómo fue que te fue tan bien en los tribunales? Y que el me contestara Defendi como debía a una empresa sumamente importante, de ese dia para adelante todo fue un lecho de rosas, cansado y mucho trabajo pero, también soy reconocido y me gusta lo que hago. Las conversaciones eran mas entendibles para mi. Eugenia nos había felicitado con especial emoción a Peter y a mi por nuestro embarazo y compromiso, de una forma tan Eugenia y con las palabras Yo sabia que no se aman, solo porque le inflaste el bombo tienen que casarse, yo lo sabia. Yo sabia que era feliz por mi. Y en efecto como le dije que sucedería al decirle a Nicolas, paso, el quiere adoptar un bebé para poder criarlos juntos. Mi viente crecia dia a dia, no tenia los antojos de embarazada y no se me daba por comer todo el dia, Peter dice que le baje un poco al movimiento, pero el no entiende lo que es planear una boda, el solo tiene que rentar un traje y lucir lindo. Entre al apartamento, Peter estaba dormido en el sillón, había una libreta tirada en el suelo, me acerque y la recogi, sin intención se abrió en una pagina y las primeras palabras me atrajeron mucho

Y si, digo que me parecería de lo más bonito del mundo tomarnos de la mano y besarnos frente a los demás. Y comer fresas con crema de tu boca o de tus piernas en mi casa de campo mientras preparo chocolate caliente y tu enciendes la calefacción. Y estar cada noche en la azotea viendo constelaciones mientras te hago dibujos en la espalda de las mismas. Y decirte que me encantaría pasar horas dando vueltas en la cama mirándote y jugando contigo a que somos gatos que no quieren dormirse y quieren jugar hasta que se vaya la luna. Y quisiera despertar todos los días viéndote despertar. Hacerte el desayuno, el amor. Compartirte mi vida. Decir que no hay peor ciego que el que no te quiera ver, y que la verdad el mundo sería bastante aburrido sin tu existencia. Y que me ha gustado un montón haberte encontrado. Y que sólo me sentiría perdido si te suelto de la cintura cuando bailemos. Que sólo en tus labios es que puedo calmar mi sed de verdad, y en tus ojos es que puedo disfrutar de un próspero amanecer. Que con nuestros cuerpos rozados uno al otro mi corazón da latidos de fuego artificial. Que la vida sin ti es un desperdicio, y que no me importa el tiempo que tenga que pasar esperándote porque te vistas a la hora de salir. Que no me importaría llegar tarde al trabajo si cada mañana despertamos, te hago el café comemos y hacemos el amor antes de despedirnos. Que sonreír es mucho más bonito cuando lo hago porque lo haces tú. Que me encantas con pijama, sin pijama, con lo que sea. Que eres tan bella que no dejas que nadie más para mí lo sea. Corretear por la cocina desnudos por estar jugando a las escondidas, aparecerme en la ducha cuando tu lo estás, abrazarte y besarte haciéndote saber que eres la mejor persona del mundo y que ser feliz es sinónimo de estar contigo. Y besar tu cuello y acariciar tu vientre mientras digo que soy capaz de darle la vuelta al mundo para abrazarte por la espalda. Así te quedaría claro que eres amada por mí.

Si, la sensibilidad estaba a flor de piel porque mis lagrimas ya salian, cayo una en la mano que Peter tenia extendida en los asientos del sofá, abrió los ojos y me miro, después dirigio su vista a la libreta café que tenia entre mis manos

Peter: Hey, ¿Por qué lloras, tan mal escribo? –Sonrei y negué secándome las lagrimas- ¿Entonces?

Lali: ¿Estos son tus votos?

Peter: No, amor, vos sos muy curiosa, mis votos están escritos en otro lugar, eso solo es algo que escribi…para vos –Lo mire secándome la nariz con un pañuelo- ¿Te gusta?

Lali: Me encanta, amor

Peter: Te amo –Me sento sobre sus piernas y me beso-  ¿Cómo te fue hoy?

Lali: Bien ¿A vos? –Asintio y me beso- ¿Vamos a la casa a pintarla?

Peter: Si, deja me pongo algo mas viejo –Asenti y camine con el a la habitación- Vos sabes que no vas a pintar ¿Cierto?

Asenti. Si iba a pintar pero no me convenia decirle porque iba a volver a su idea original: Contratar a un pintor. El fin de semana pasado habíamos terminado de pintar toda la planta de arriba y puesto cajas a lo largo del pasillo, el apartamento estaba casi vacio y eso me daba felicidad, porque ya íbamos a tener un hogar solo nuestro. Llegamos a nuestra casa; Dos pisos, color blanca, ventanales cuadrados de esquinas redondeadas con pequeños balcones de herrería negra saliendo de ellas, puerta negra con un marco de herrería, y un pequeño farol al lado, un jardín delantero con un árbol y flores en el, reja negra con un buzon al lado de la puerta, jardín trasero con pileta y lugar para asados, pisos de madera lustrada, tres habitaciones arriba y dos abajo, con baños integrados, cocina integral en colores rusticos, living enorme, techo alto y lo que, sin duda, mas me gustaba era el enorme ventanal en la habitación principal y que había mucho lugar alrededor de la pisina para poder poner flores. Habia lugar para crear un hogar hermoso y lleno de amor

Lali: Dale, amor, veni –Abri la puerta de la reja y después la principal, el olor a guardado salia de las paredes-  

Peter: No corras, Lali –Entre a la casa y vi que Peter no venia detrás de mi, mire hacia afuera y lo vi platicando con una morocha, Sali y me recargue en el marco de la puerta, me miraron y sonrieron, se acercaron- Amor, ella es Jimena. Jimena, ella es Lali, mi prometida

Jimena: Un gusto ¿Cuándo se mudan? –Miro a Peter-

Peter: Seguramente la semana que viene –Tomo mi mano y sonreí-

Jimena: ¿Y cuandos se casan? –Miro nuestras manos entrelazadas-

Lali: Dentro de diez diaz ¿Vos estas casada, en pareja, divorciada, viuda? –Peter apretó mi mano-

Jimena: De novia, bueno, los dejo para que sigan con su mudanza o lo que sea que estén haciendo, estoy al lado para cualquier cosa –Asentimos y salió de nuestro porche para ir a su casa-

Peter: Parece agradable

Lali: Si, lo mismo decían los indios de los españoles y terminaron conquistándolos y robando todo lo que poseían

Peter: Amor, no seas paranoica. Te amo –Me beso y entramos a la casa-

***

Mamá: Y bueno, hoy es el dia –Asenti y acaricie mi vientre de siete meses de embarazo, estaba grande pero no tanto como quisiera- Te ves hermosa

CONTINUARA

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