Capitulo 26

Hola, si, seguramente estan diciendo "¿Quien es esta loca, que hizo con Dani?" Se que es RARISIMO que suba dos capitulos seguidos, pero esta es mi forma de disculparme por colgarlas tanto. Intentare subir mañana tambien. Las quiero y gracias por leer. 

Capitulo para Angela que esta de un humor horrible. Ojala te lo mejore esto, linda. Te quiero. 

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-Por otro lado esta mi madre que si de por si no esta de acuerdo con mi matrimonio, si se enterara de esto seria…

-Quiero conocerla

-¿Qué?

-Quiero conocer a tu madre  

Okey, ¿Cómo es que ese “Quiero conocer a tu madre” salió de mi boca? Lali me miraba entre sorprendida y tildada, muy tildada. Hasta yo me miraría tildado ¡¿Llevo un mes y pico conociendo a la mina y ya quiero conocer a la madre?! ¿Qué mierda te pasa, Juan Pedro?

-¿Conocer a la madre? Me estas jodiendo –Dijo Nicolás mientras terminaba de darle un trago a la cerveza-

-Está estúpido por la mina, es así

-¿Quién esta estúpido y que mina? –Pregunto Renzo mientras llegaba y colocaba mas cervezas sobre la mesa- Hola, belleza –Beso la mejilla de Sofia y se sento junto a ella- ¿Qué pasa?

-¿Y Franco y Tincho?

-No se, esos pelotudos se pierden durante días y regresan como si nada

-Les llame y dijeron que vendrían

-Entonces seguro vienen, no he hablado con ellos desde la joda de Mardel –Me sonrió cómplice y recordé esa joda, la mejor-

-¿Qué paso en Mar del plata? –Intervino Sofia mirando a Renzo, en esa época ellos estaban en “algo”-

-Nada –Él beso su mejilla y yo los mire sospechando- ¿Entonces de que hablaban cuando llegue?

-Tu amigo esta vuelto un estúpido con una piba

-¿Qué piba? ¿Esta buena? –Sofi revoleo los ojos y se levanto-

-La mina es casada –Dijo eso y se retiro, Renzo me miro-

-Me estas cargando –Me tire hacia atrás cayendo de espaldas en la tumbona-

-No, no te esta cargando. Adivina quien es el esposo –Dijo Nicolás mientras me miraba reprobatoriamente-

-Emm…no se ¿Quién?

-¿Te suena Pablo Martinez? –Renzo me miro sorprendido-

-¡¿Vos sos pelotudo?! 

-¿Quién es pelotudo? –Dijo Franco Battezzati, él y Tincho pasarían por la carne para el asado-

-Este pibe –Renzo me señalo sacado-

-¿Qué hiciste, Pedrin? –Tincho me rodeo el cuello con su brazo y lo apretó-

-¿Ubican a Pablo Martinez? El narcotraficante cabron al que Colombia se la tiene jurada

-¿Qué tiene que ver con Peter? –Franco nos miraba confundido-

-Aca tu amigo se esta cogiendo a la mujer –Ambos me miraron con los ojos como platos-

-¡NO! –Dijeron al unisono, Renzo asintió- ¡¿Sos pelotudo?!

-Chicos…

-“Chicos” un huevo, Juan Pedro ¡¿Qué te pasa, pibe?! ¿Sabes que va a pasar si el tipo los descubre? Recuerda que no nos gustan los funerales, eh

-A ver, cálmense –Dijo Tincho-, vayamos a lo importante; ¿Esta buena? –Pregunto y lo mire enojado-

-Si, esta muy buena –Dijo Nicolás encendiendo el asador-

-¿Entonces cual es el problema? No los veo reclamándole a la piba por cuernear a su marido –Dijo con clara énfasis en la ultima palabra-

-A ver si me entendes, Tinchito, el que nos interesa es él, no la mina

-Así es, la mina es la casada, ella tendría que tener respeto por su marido y no andar de calienta braguetas

-¡Epa! ¡Epa! ¡Epa! –Me levante mirándolo- Basta con la pavada, a ella la respetas

-Imbecil, entendelo

-¡Entiendo un huevo! Son mis decisiones, si me quiero meter con la esposa del presidente me meto porque se me canta el orto. A Lali la respetas, Renzo, enserio te digo

-Ah, bueh, se nos enamoro Pedrito nomas –Lo mire serio-. Me estas jodiendo

-Si, me enamore ¿Cuál hay?

-Que sos un pelotudo, esa hay –Dijo Sofia llegando con las verduras-

-¡Sof, no sabia que estabas! –Le dijo Franco abrazandola-

-Si, si, no iba a faltar a ver como cagan a su amigo –Ellos sonrieron y le hicieron un lugar para que se sentara- ¿Viene Azul?

-No se, no creo, tenia un asunto con la madre hoy

-Uh, me dejo sola con ustedes la muy guacha –Ellos la miraron insinuando algo y Renzo les pego en la cabeza-

-¿Siguen con el “algo”? –Pregunto Tincho-

-No

-¿Entonces?

-Eh…aquí venimos a cagar a Pedro, no a que se le tiren encima a Sofia

-Uh, no me jodas, a ustedes les pasa algo

-Si, nos pasa –Se miraron entre ellos-. Nos pasa que ambos queremos cagar a patadas a Peter por ser tan imbécil y enamorarse de una mina que no vale

-Sofia…-Empece a decir-

-Es así, Peter. A ver, pongamos un ejemplo; Vos le pedís que deje a Pablo por vos, y ella lo hace ¿Qué te hace creer que no te va a ser venado a vos tambien?

-Porque es diferente

-El que engaña una vez engaña siempre

-Tiene razón, Peter

-Seria muy hipócrita de mi parte decir que los que engañan son un asco ¿No? –Dije serio-

-La diferencia es que ahora vos sos el tercero –Me dijo Tincho, nunca sono tan serio como ahora-. Sos Peter Lanzani, pibe

-¿Y?

-Que vos no mereces que te oculten en el armario porque el esposo llega –Me dijo Sofia con la voz dolida-. Desde que conociste a esa mina que ya no te reconozco, sos otro

-Soy el mismo

-El otro dia vino una mina buenísima y le dijiste que “mejor no”, eso no hubiera hecho mi Peter Lanzani –Continuo-

-Estoy empezando a valorar a las mujeres

-¿Por qué? ¿Por qué ahora? Justo ahora que estas con una mina que no vale mucho que digamos, eh

-¡Renzo, basta!

-¡¿Qué queres que te diga, pendejo?! ¡¿Queres que te felicite por garcharte a la esposa de un narcotraficante bastante pesado?! Si eso queres decimelo, pero no va a salir de mi voluntariamente. Si seguís con esa estupidez estas firmando tu sentencia de muerte, porque si el pibe los llega a descubrir ten por seguro que te mata, y a la mina tambien

-¡Es mi asunto, maldita sea!

-Es el asunto de todos, Pedro, ¿Podes entenderlo de una puta vez? Si vos te moris, se muere nuestro mejor amigo –Los ojos se le pusieron aguados y Renzo la abrazo por detrás-. Cortala con la piba, Peter, por favor, no es buena mina 

-No lo sabes, Sofi –Me acerque a ella y tome sus manos-. Ella enserio es la mejor mujer que he conocido en mi vida, me hace muy feliz –Me miro enojada y saco sus manos-

-¿Qué tan buena piba es que le mete los cuernos a su marido? Eso no es de buena mina

-Yo se, pero enserio, enserio, la quiero muchísimo

-Peter, tenes que cortarla con ella antes de que los descubra

-No nos va a descubrir

-Chicos…-Dijo Nicolás, pero continuamos-

-¿Y si los descubre que pasa? –Me pregunto Franco- Vos sos queso seguro, eh

-Chicos, yo creo que…-Lo interrumpi-

-Dejen de ser tan pesimistas, el hombre nunca esta y jamás sospecharía de nosotros

-No, seguro que no –Dijo de forma sarcástica Sofia-

-Em…pibes

-Mira, a nosotros nos importa un huevo la mina, a nosotros nos interesas vos, tu muerte es la que vamos a llorar

-Ya van con eso otra vez

-Esta mina es peligrosa –Dijo Tincho separando por silabas la ultima palabra-.  

-No, chicos, esta mina es la mejor

-¡La mina es una pelotuda!

-¡Chicos!

-¡¿Qué?! –Dijimos todos al unisono y señalo la puerta que conectaba el balcón con el resto de mi apartamento. Lali estaba parada en la entrada- 

Continuara 

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