Capitulo 15

-¿Debo asumir que es algo no legal?

-Debes asumir que cuando yo te digo “No es asunto tuyo, Lali” es porque no es asunto tuyo, Lali 

-No me gusta que me hables así

-Lo siento, es solo que no es asunto tuyo

-Si, ya me quedo claro eso

-No quiero que te enojes, amor

-No, pero tampoco confias en mi como para decirme de que laburas ¿Es legal al menos? –Desvió su mirada- Pablo

-Mariana, basta

-Se me quitaron las ganas de salir

-Estas enojada

-¿Por qué habría de estar enojada? ¿Porqué mi esposo no me tiene confianza o…?

-No necesito involucrarte en esto

-Con eso me dijiste que estas metido en toda esa mierda de los laburos ilegales y…-Negue, no se me daba muy bien eso de juzgar- ¿En que sector estas? ¿En las drogas? ¿Trata de blancas? ¿Trafico de órganos?

-No es asunto tuyo, Mariana

-¡Oh, que mierda! –Di media vuelta sobre mis talones y fui al patio, vi un rosal que medio planto Peter y sonreí; Este trabajo no es para él, sin duda-

-Lali, hablemos

-¿De que queres hablar? ¿De cómo prácticamente me dijiste que no me metiera en lo que no me importa o de que estamos casados y no se de que trabajas? Y ni siquiera estas interesado en compartir esa información conmigo ¡Soy tu esposa, Pablo!

-Lo se, y porque sos mi esposa es que te quiero mantener lejos de toda esta mierda –Negue-

-En las buenas y en las malas ¿Recuerdas? –Suspiro resignado-

-Tenia quince años y diez pesos en mi bolsillo…

Así comenzó a relatarme como es que termino envuelto en el negocio del trafico de drogas ¿Su excusa? No tuvo opción. Sus padres lo descuidaban siempre, con el pasar del tiempo ellos se enteraron y no se lo impidieron, ni siquiera lo retaron, Pablo se convirtió en la fuente económica de su familia con tan solo quince años. Vos veías a Pablo y no te parecía un tipo débil, al contrario, tiene esa pose de Macho men yo puedo con todo que no te imaginas que en realidad es un pibe que comenzó a trabajar desde temprana edad para sostener a una familia de mantenidos, cuando lo conoci me atrajo de él su seguridad en si mismo, nunca me mostro esta faceta suya, aunque claro, si me hubiera dicho que es traficante de drogas lo hubiera pensado dos veces antes de siquiera salir con él. Es un delincuente muy extraño, digo ni siquiera tiene guaruras tras de él, o capaz que es un traficante tan bueno que nunca han sospechado de él. ¿Qué estoy diciendo? ¡ESTOY CASADA CON UN TRAFICANTE DE DROGAS!

-¿Por qué nunca me dijiste esto, Pablo? –Acaricie su mejilla. Estabamos sentados en las tumbonas, él frente a mi-

-Por lo que te dije hace un rato, Lali; No quiero involucrarte en todo esto. Ya es suficiente con que yo este atrapado en esta mierda, no te quiero a vos tambien embarrada

-En las buenas y…-Me interrumpió-

-Si, y en las malas, pero esto es mas malo que bueno, tendría que haberte advertido que conmigo habrían mas malas que buenas, pero es que te amo tanto que no soportaría perderte

-Y no me vas a perder

¿De nuevo haciendo promesas que no vas a cumplir, Lalita? Dijo mi subconsciente negando reprobatoriamente y chasqueando la lengua.

-Repiteme que fue lo que te dijo –Me dijo Sofia por tercera vez en la noche-

-No, basta

-Es que no entiendo, Peter, cuando se fue parecía muy decidida a empezar a ser tu amante, pero te manda un mensaje diciendo que te olvides de ella. Que mina tan mas rara

-Decimelo a mi

-¡A vos lo que te voy a dar es una piña, pelotudo! Estas haciendo de jardinero en la casa de un idiota arrogante que te va a pagar a la semana lo que vos ganas en una hora ¿Sos idiota?

-Sofia –Negue-

-¿Cómo se llama este pibe por cierto?

-Emmm…-Trate de recordar el nombre- Pablo…Pablo algo, no recuerdo

-Averigua entonces, voy al baño –Revolee los ojos-

Nico ¿Vos sabes como se llama el pelotudo esposo de Mariana?

No, Pablo algo ¿Por?

Sofia quiere saber

Deja que averiguo con Euge

Dale!!!

Espere, mientras esperaba le mande un mensaje a Natalie

Hola, divina

Peter, que tal!?

Nada ¿Vos?

Igual ¿Haces algo hoy?

No no ¿Venis a casa?

Vi el “escribiendo…” pero enseguida llego el mensaje de Nicolás

Pablo Martinez se llama

Me suena ese nombre

Es el de la casa del lago, Pedro

No, no, no me refiero a eso, me suena de algun lado

Bueno, capaz que lo has escuchado muy seguido últimamente.

Si, puede ser

Oye ¿Cuándo vamos a renunciar a ese lugar? Tanto trabajo manual me esta arruinando las manos

¡QUE MINA QUE SOS!

Y vos un pelotudo!! Yo lo que deberia estar haciendo es trabajando en una oficina, como venia haciendo HASTA QUE TE CRUZASTE CON ESA MINA!!

Yo no te pedi que pidieras trabajo vos tambien

Ni loco te dejaba sola en esta, pibe, mira si me voy a perder toda la diversión!

Andate a cagar

-¿Y? –Llego Sofia, miro su celular, frunció el ceño y lo apago-

-Pablo Martinez –Junto tanto sus cejas que parecieron una-

-Me estas jodiendo –Negue, tomo su teléfono y momentos después me mostro una foto del pelotudo ese- ¿Es este?

-Si, es ese ¿Por qué tenes una foto suya en tu celular, enferma? –Me rei-

-Oh, pasa que tengo internet

-¿Esta en internet? ¿De que labura o que?

-Es narcotraficante, Peter –Dijo obvia y sorprendida de que no lo supiera-

-¿Qué? Nah! Mira si Lali va a estar casada con un narcotraficante, Sofia, nada que ver

-Puse “Pablo Martinez” en el buscador y me salto su foto ¿Vos sos pelotudo siempre o paras en vacaciones?

-Pero es que es imposible

-¿En donde conociste a la piba, Pedro?

-En un bar, ya te lo dije ¿Por?

-Pregunta. ¿Por qué no te alejas de ella? Son gente muy pesada, Peter, tengo miedo de que si los llega a descubrir te meta una bala o…-La interrumpi, enserio se veía preocupada-

-Tranquila, Sofi, hey –La abrace-. No me va a pasar nada ¿Recordas que te conte que Lali corto todo? Se termino

-¿Vas a renunciar a ese lugar?

-Si, si, mañana hablo con él, tranquila, loca –Bese su frente y el timbre sono-

-¿Esperas a alguien? –Negue, se levanto y oprimió el botón del intercomunicador- ¿Quién?

-Natalie  -Dijeron del otro lado. Asenti y abrió-

-Jodeme que es la loca que se queria casar con vos –Asintio. No recordaba porque habíamos terminado- ¿Y que hace aquí? –Golpearon la puerta- Me voy a ir mientras ustedes…-La interrumpi-

-Solo vamos a hablar

-Si, tus compañeras suelen gritar mucho cuando hablan –Dijo con doble sentido-. Voy a llamar a Mary o a Valeria o a…-Ladeo la cabeza y volvieron a golpear la puerta- ¡YA VA! –Grito desesperada- ¿Me llamas cuando se vaya?

-Claro, linda –Sonrio, se acerco a mi y beso mi mejilla-

Tomo su abrigo que estaba colgado en la percha junto con su cartera, abrió la puerta y ahí estaba Natalie, solo que ahora era morocha

-¿Y vos sos…? –Le pregunto Natalie a Sofia, ella simplemente la ignoro y salió- ¿Ella es…? –Me pregunto arqueando una ceja-

-Una amiga –Me sonrio y se acerco- ¿Cómo has estado?

-Ocupada –Sonrio, me rodeo el cuello con sus brazos y la bese- ¿Para eso me llamaste? –Dijo con un tono de ironia en la voz- Fuiste vos el que termino todo entre nosotros

-Y bueno ¿No puedo retractarme? –Ladeo la cabeza de un lado a otro-

Si recordas que esta piba se QUERIA CASAR CON VOS ¿Cierto? Dijo mi subconsciente.

-No estoy para relaciones justo ahora –Se mordió el labio complicada-

-¿Tenes novio?

-No –Sonrió y esta vez fue ella quien me beso-

-¿Entonces?

-Solamente no estoy para relaciones justo ahora –Remarco la palabra relaciones y sonreí pícaro- 

Continuara 

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Beso