Capitulo 8

Despues de salir de la casa de Lali fuimos directo a la empresa, Nicolás seguía cuestionándome por lo que hice. Mierda, ni yo se porque lo hice,  solo se que me dio mucha rabia ver como ese imbécil la besaba y la abrazaba y…le voy a partir la cara.

-Peter, te deje los apuntes sobre tu…-Me miro- ¿Qué haces vestido así?

-Annie, te necesito –Asintio, entre a mi oficina con Nicolás detrás-

-¿Qué pasa, Peter? –Dijo An-

-Tengo un empleo

-Si, lose, trabajo para vos

-No, no, otro empleo…de jardinero –Abrio los ojos como platos y se le cayeron la lapicera y el bloc de notas- y necesito que nadie aquí se entere

-¿Cómo queres que nadie se entere si…esto es por una piba, cierto?

-Si/No –Dijimos Nicolás y yo al mismo tiempo, ella me miro con expresión obvia y suspire-

-Si, es por una piba

-Sos un imbécil

-Y sigo siendo tu jefe

-Mi jefe imbécil –Me sonrio-, pero creo que eso es tierno, no entiendo porque tenes que ser jardinero para estar con ella, digo, vos, Peter Lanzani, arquitecto y multimillonario levantarías muchísimas mas minas que siendo un simple jardinero, sin ofender a los jardineros, claramente

-Es difícil –Me miro intrigada y se mordió el labio intentando descubrir que es lo que ocultaba, abrió los ojos como platos-

-La mina no es soltera ¿Cierto?

-¡¿CÓMO MIERDA LO HACES?! –Dijimos al unisono Nicolás y yo-

-¡Mierda! Es casada

-Me das miedo –Dijo Nicolás-

-¿¡Como te atreves a ayudarlo, Nicolás!? es un plan tan estúpido que…-Nego con la cabeza- ¡Ustedes dos, estúpidos calientes, estan tras un par de amigas ¿¡CIERTO!?!

-Tu asistente me da miedo, mucho miedo, Peter

 -Ustedes los hombres son tan predecibles…tan –Nego reprobatoriamente- ¿En que les puedo ayudar con este plan tan tonto?

-Necesito que me cubras

-Sos el jefe, decime que tengo que hacer y lo hago –Asenti-

Miraba a Peter, o a Martin, mientras hacia su trabajo, es bastante malo plantando flores, deje la limonada en la mesa y marque la pagina en la que me quede y camine hacia él

-¿Qué estas intentando hacer con mis rosales?

-Suenas como toda un ama de casa

-No me conociste antes, capaz siempre fui así

-No pareces una mina con complejo de ama de casa

-¿Ah no? –Nego- ¿Qué mina parezco? –Clavo la cuchara en la tierra, se sacudió las manos y se sento para mirarme mejor-

-Pareces una mina bastante tranquila, pero no siempre fuiste así, tampoco parece que seas reventada, sos mas como una mina cuyo plan preferido para un sábado es un buen café y su libro favorito, del tipo de minas que a mi me vuelven loco

-Mira vos –Sonrei y me sente junto a él-

-¿Y yo?

-¿Vos que?

-¿Yo que tipo de pibe parezco?

-Primero; Vos no pareces un pibe, sos todo un hombre –Sonrio. Su sonrisa es hermosa, de costado y tan…sexy-. Pareces un tipo al que le gusta la buena vida, que ha tenido una muy buena vida, no pareces un jardinero, pareces un tipo al que le gustan las minas…quizá demasiado…sos un hombre con un gusto exquisito

-¿Eso lo dijiste porque sabes que me gustas o…? –Lo mire sorprendida y estalle en risa, pero era una risa nerviosa ¿Le gusto?- Que linda risa que tenes

-No lo dije por eso…-Me miro sospechando- enserio, además no sabia que te gusto

-Lali, enserio hay que ser ciega para no darse cuenta de eso

-Pues entonces soy ciega

-Desde que te vi esa noche en el bar que no puedo dejar de pensar en vos

-¿Por eso estas aquí? Peter, soy casada

-Sí, lose, y no sabes cuánto lamento eso

-¿Y si lo sabes por qué estas aquí?

-Porque cuando algo me gusta no descanso hasta que sea mio

-Yo no soy un objeto y te agradecería mucho que si seguís trabajando aquí evites eso, no quiero un problema con Pablo por tu culpa

-No te prometo nada, con permiso, señora –Achine los ojos-

Lo mire mientras se alejaba y me pregunte ¿Enserio dijo que le gusto?

Continuara 

¿Quieres que te avise cuando suba nuevo capítulo? 

Déjame tu twitter.

Beso