Capitulo 10: Angustia.

Me desperté, y el agujero en mi pie aun me dolía cuando caminaba. Mire mi celular, estaba a punto de mandarle un mensaje a Lali cuando el aparato repiqueteo contra la mesa de cristal. Lo tome, era un mensaje de Gastón

Te espero en la casa de la nona ¡Sin excusas ni pretextos! Te doy una hora

Bufe. Me levante y entre a la ducha. Desayune cualquier cosa y, en media hora, estaba rumbo a la casa de mi abuela.

A la mitad del camino me di cuenta que mi celular se había quedado en la mesa de luz. Maldije en voz baja y suspire.

Ya que

-¿Qué paso? –Le pregunte a Gastón cuando abrió la puerta-

-Quiere vender la casa –Me dijo, con un tono entre preocupado y cansado-

Suspire. Había intuido que esto pasaría. Y es obvio.

-¿Qué pasa, viejita? –Le dije cuando llegue a su lado-

La mire a los ojos, lucia triste, muy triste. Verla así de mal me estrujo el corazón.

-Ya no quiero estar aquí, Pedrito, ¿Vos entendes, no?

Asenti con los ojos cerrados, le rodee los hombros con el brazo y la atraje a mi. Bese su cabello. Senti que una lagrima cayo en mi brazo. Aprete los labios para que el corazón no se me arrugara.

-Me hace tanta falta, hijo –Asenti-

-Lo se, nona, lo se

Gaston nos miraba. Sus ojos estaban llenos de lagrimas. La partida del abuelo aun duele.

-¿Queres ir a comer?

-No, llevame a la casa de tu tia Fernanda, ¿Si?

-¿Segura? ¿No queres venir a casa a dormir hasta que te sientas mejor? –Le pregunto Gaston-

-No quiero molestar, hijo

-No molestas, abuela. Gaston, anda a armarle un bolso. Se viene con nosotros

Ella apenas nos sonrio. Ahora eramos los tres contra el mundo.

Salimos de la casa. Fuimos a comer a su restaurant italiano favorito. Gaston intentaba hacerla reir con sus anécdotas inventadas. Me mata verla así. No estoy acostumbrado a verla así.

-¿Queres ir al cine? –Le pregunto mi hermano, intentando distraerla-

-Si ustedes quieren…-Se encogió de hombros, pero termino asintiendo-

Conduje hasta el cine. Al fin se animo un poco y empezó a contarnos anécdotas del abuelo, anécdotas graciosas de ellos juntos. Terminaba todas las historias con un “Era el mejor hombre de mi mundo” y suspiraba.

-¿Siempre si vas a querer vender la casa? –Le pregunte mientras saliamos del cine-

-Si, no me hace bien estar ahí

-¿Y donde vas a vivir, vieja?

-Con tu tia Fernanda, somos dos viejas a las que nos falta nuestro compañero de vida

-¿Segura? Mira que te podes venir a mi casa o a la de Gaston…-Nego y solto una risa-

-¿Qué voy a hacer yo en su casa, hijos? No. Me voy con tu tia Fernanda

-Muy bien –Asenti-, entonces yo te compro la casa

-¿Cómo te la voy a vender? No, quédatela

-No, te la compro. Ademas, pensa que con el dinero te poder ir a Venecia, o a Italia, o a las islas galapagos –Se le ilumino la mirada. En ese lugar habían tenido su segunda luna de miel- a descansar ¿Te gustaría?

-Me encantaría, hijo, pero ¿Qué harán sin mi? No los puedo dejar solos

-Ya somos grandes. Ademas no te irias ya, ¿No? –Nego y beso mi mejilla-

-Gracias

-No agradezcas.

-¿Qué paso? –Pregunto Gaston, se habia ido a contestar una llamada-

-Voy a comprar la casa de los abuelos –Me miro, sorprendido, y asintió-

-Bien, entonces ya vamos a poder hacer fiestas sin que les tengamos que mentir –Rei, la abuela le pego en la cabeza-

Mientras conducía a la casa de Gaston, y su novia Martina, me acorde de Lali y de la tarjeta esa.

-¿Gaston, que hora es?

-Ocho y cuarenta y cinco, ¿Por? –Negue restándole importancia-

Mierda.

Se que fue, se veía muy intrigada por quien fuera que le haya mandado las flores. Y saber eso me enfurece de una manera que jamás me habia enfurecido nada. El por que, aun no lo se.

-Llegamos –Dice Gaston, sacándome de mi pensamientos. Entre al garaje y estacione-

-Hola –Nos saluda Rocio, mira a mi abuela y se le dulcifica la mirada-

Ella tiene ese poder en todos los que la conocen, y un poco en los que no la conocen.

-Hola, Julia. ¿Cómo esta? –Le pregunto con mucho respeto y cariño. Beso su mejilla, la abuela la abrazo-

-Muy bien, ¿Vos? –Rochi asintió, sonriendo-

-Hola, potro –Me dijo, burlona. Bese su mejilla- ¿Cómo estas? Me dijo Gastón que estas enamorado –Mire a Gaston y asintió sonriendo-

-Gaston exagera como siempre.

-Entonces, despues me contaras de quien estas enamorado, ¿No?

-Podria ser –Se rio, con esa risita que hace que Gastón la mire embobado. Y justo así la esta viendo ahora-

-Pasen, dale. Hola, amor –Le dijo a Gastón detrás nuestro-

Nos sentamos en el living, decidimos el precio de la casa, y Roció nos conto lo bien que le está yendo con el bar que puso en conjunto con una amiga suya.

-Veni, abuela, te enseñare tu cuarto

Le dijo Gaston, tomo su bolso y la acompaño escaleras arriba. Mire a Rocio, era toda belleza y dulzura, rubia, pero no hueca, llena de sentimientos puros y lindos, de esos que te hacen apreciar a una persona. Ella y Gaston estan completamente enamorados uno del otro. A veces los miro cuando hablan del otro, cuando nos reunimos todos y ellos hablan de algo que les paso, se les ilumina la mirada. Yo quiero algo así. Quiero algo que me haga perder los estribos por alguien, quiero extrañar a alguien aunque haya pasado todo el dia con esa persona, quiero oler algo y que me transporte a ella, quiero no necesitar nada mas que su mirada. Quiero con todas mis fuerzas tener algo como lo que tienen ellos; Así de puro, así de fiel, así de verdadero. Daria cualquier cosa por tenerlo.

-Quiero saber de tu chica –Me dijo, sonriendo, enseñándome toda su dentadura blanca. Suspire y sonreí rendido- ¿Tanto así?

-No es mi chica, eh

-Bueno, vos donde pones el ojo, pones la bala, así que no falta mucho para que sea tu chica

-No, es…complicado, Ro

-¿Cuan complicado?

-Ella…ella esta rota –Le dije, usando las mismas palabras que use cuando hable de lo mismo con Euge-

-¿Cómo rota?

-Acaba de terminar con su novio –Asintio-, él la engaño con la mejor amiga

-¡No! –Asenti- ¿Y…como la conociste vos?

-Es la ex novia de Victorio

-Me estas jodiendo –Negue- ¿Con su mejor amiga? –Asenti- Que turro

-El punto no es ese, el punto es que cuando lo hizo la rompió, ¿Entendes?

-Y eso supone un problema para vos porque…

-Porque no se si podría lidiar con algo así

-Pudiste lidiar con la enfermita de Natalie

-¿Enfermita? –Dije, reteniendo la carcajada. Asintio y señalo su cabeza- No esta tan mal

-Bueh. ¿Y por que no aplicas con…¿Cómo se llama la chica?

-Mariana…Lali

-…Por que no aplicas con Lali el mismo método que hizo que tu relacion con Natalie funcionara por dos años?

-Porque siento por Lali cosas que no sentía por Natalie –Sonrio satisfecha-

-¿Entonces si es amor?

-No, Rochi, no…no se

-¿No es amor o no sabes que es amor?

-¿Por qué estamos hablando de esto? –Le pregunte, frustrado-

-¿Por qué no hablar de ello?

-¿Por qué me psicopateas? ¡Te he dicho que no me gusta!

-Bueno, es a lo que me dedico

-No, bueno si, pero te dedicas a ello si las personas van a vos para que las analices, yo solo vine a dejar a mi abuela y a tu novio

-Bueno, es una señal

-Ay, no, ya me voy –Me levante y ella me imito-

-Peter, es mas fácil cuando dejas entrar al amor a tu vida

-Chau, Rocio

-Chau, Pedro

Subí las escaleras en busca de Gastón y de la abuela. Me despedí de ellos, y Gastón me ofreció quedarme a dormir porque el camino a casa es largo y ya había oscurecido bastante. Le pedí la hora antes de salir, eran las once con veinte. Rumbo al apartamento tome el camino largo, o me desvié, y pase por el jardín de rosas, no había ningún auto, así que supongo que, o ya se fue, o se olvido de la idea tonta de encontrarse con un extraño. Espero que sea lo segundo. 

Llegue a casa, me di una ducha, hice café y me puse a terminar el anuncio después de chequear que el primer deposito y una muy buena parte del segundo habían entrado a mi cuenta bancaria.

Tome mi celular para chequear la hora: 3:45 AM. Tenia varios mensajes en Whatsapp y doce en la bandeja de entrada, dos llamadas perdidas; Una de Euge y otra de Nacho, un amigo de la facultad que hace bastante no veo. Una llamada perdida en Skype de un numero desconocido, pero que dejo un mensaje

Somos una empresa mexicana. Nos recomendaron su trabajo. Necesitamos de sus servicios para una campaña de concientización sobre el cáncer de mama.

Esperamos comunicarnos pronto.

AVON.

Les conteste. 

Mire los mensajes en Whatsapp, había muchísimos de Eugenia y de los chicos de la banda, y dos de Lali. Solo vi los de Lali.

Hola, se que por ahí y estas ocupado, o no sé. Llámame cuando puedas.

¿Estás enojado por lo de la tarjeta?

El último lo envió hace media hora.

No, no estoy enojado.

¿No?

No.

Se que no, pero todo el día sentí esa sensación de alerta.

Hola (:

Hola ¿Cómo te fue?

Bien

¿Quién era?

Victorio

Y?

Luego hablamos, si?

Eso no me deja bien

Buenas noches, Pitt (:

¿Victorio? ¡Victorio! ¿Qué mierda quiere ese con Lali?

-Mira, se que no me corresponde, pero quiero que me corresponda, así que contame por que fuiste anoche 

-Peter, ¿Qué haces aca? –Me pregunto Lali cuando entre en su oficina-

-¿No me escuchaste?

-¿Quién te dejo entrar?

-Tu oficina no es precisamente el pentágono, eh –Me miro inquisitiva-. Patricia no estaba en su lugar, solo entre. Contestame

-Fui porque tenia curiosidad, vos sabes, te dije –Asenti-

-¿Y?

-Y era Victorio, me pidió de hablar como personas civilizadas

-¿Y?

-Y… lo golpee en su entrepierna –Sonrei. Esa es mi chica-

No es tu chica. Dijo mi subconsciente.

-¿Y?

-Y nada, volvi a mi apartamento a comer empanadas

-Bueno, esta bien.

-No, las empanadas estaban frias. –Sonrei-

-¿Salis a comer? –Negue- ¿Salis a comer conmigo? –La mire, sonriendo de costado. Suspiro rendida, sonrio-

-Esperame veinte minutos, ¿Si?

Asenti y me recargue en el respaldo de la silla. La mire mientras leia unos papeles y los transcribía en la computadora. Se veía tan concentrada y tan frustrada al mismo tiempo. Me incline hacia adelante, ella me miro por el sonido que hice al moverme, me sonrio y extendió la mano mostrándome su palma, pidiéndome cinco minutos mas, asentí.

Me di cuenta que estaba sonriendo cuando empezaron a dolerme las mejillas.

Peter, es mas fácil cuando dejas entrar al amor a tu vida.

¿Si? ¿Siempre es fácil cuando aceptas que estas enamorado? ¿Siempre? ¿Qué pasa si esa persona no te corresponde? ¿Qué tiene de “Facil” sufrir por amor? ¿Qué tiene de lindo, de comodo, sufrir porque la otra persona no te corresponde en sentimientos? Es decir, Lali me ha demostrado que siente, no se si lo mismo pero, que tiene sentimientos hacia mi. ¿Y si no son los mismos que yo tengo hacia ella? ¿Y si es tanto lo mal que la dejo Victorio que no es posible que este con alguien mas? ¿Dónde queda Natalie en todo esto? Porque no senti que lo nuestro haya quedado cerrado del todo. ¿Qué tiene de “Facil” dejar entrar al amor a tu vida si el amor no quiere entrar? 

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Se que es corto, y lo siento. El proximo va mas largo. Beso (:

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Beso